jueves, 5 de junio de 2014

El misterio del carterista de Michael


El otro día, cuando estábamos en la Playa Colibri, Michael había pensado que algún carterista había robado su teléfono y tarjeta de crédito. Pero lo que me enteré era una historia diferente. Estaba durmiendo tranquilamente en la cama del tamaño rey en la habitación. De repente, el sonido de delfines y cascadas empezó a sonar a las 6:30 por la mañana para despertar a mí. En mi estado de medio dormido y medio despertado, tenía que cazar la fuente del sonido. Lo encontré en una mochila de Michael y lo llevé a la meseta en el otro cuarto porque no podía aguantar el ruido nada más y para que pudiera dormir más. Entonces, luego Michael me preguntó si yo había escuchado todavía a su fiasco de ayer. Dije no para ser educado y él me dijo todo lo que pasó (cómo pensó que su teléfono había sido robado pero por la mañana lo encontró encima de la meseta). Para responder yo dije: Pero Michael, oíste de mi fiasco? A las 6:30 por la mañana me desperté al sonido de delfines y cascadas.  

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